El vidrio serigrafiado se caracteriza por tener depositada en una de sus caras, esmaltes vitrificables por el sistema de impresión serigráfica. Posteriormente a la impresión del dibujo, los vidrios serigrafiados se someten al proceso de templado. En dicha operación el esmalte queda vitrificado formando masa con el vidrio
Con esta técnica se puede decorar todo tipo de productos hechos con vidrio, como paneles, mamparas, puertas, ventanas, e incluso fachadas . Las posibilidades de diseño se multiplican, ya que se puede jugar con las diferentes combinaciones, obteniendo en un mismo cristal una zona transparente, opaca o translúcida.